Probablemente no nos conozcas, pero como ciudadanos y como profesionales hemos comenzado una lucha que también es la tuya. Estamos en lucha por muchos motivos, porque consideramos que cualquier persona –independientemente de su nivel económico- tiene derecho a recibir unos servicios mínimos en materia sociosanitaria. Estamos en lucha porque quieren quitarnos nuestro trabajo, porque quieren que la situación de las personas drogodependientes se agrave con el cierre de los siete Centros de Atención (CAD) que actualmente subsisten en la ciudad de Madrid.
Desde 1986, el Ayuntamiento de Madrid ha mantenido en funcionamiento el Instituto de Adicciones del que dependen los siete centros de Atención a Drogodependientes. Los distritos de Arganzuela, Hortaleza, Latina, San Blas, Tetúan, Vallecas y Villaverde cuentan con equipos interdisciplinares compuestos por médicos, enfermeros, psicólogos, trabajadores sociales y terapeutas ocupacionales. También existen tres centros concertados en Casa de Campo, centro concertado Fúcar y otro de Cáritas. El hecho de que estos centros se encuentren zonificados facilita la accesibilidad y el ahorro económico para los usuarios. Hasta ahora.
Los centros de Doctor Santero y Moratalaz, ambos de Cruz Roja, ya tienen fecha para cerrar sus puertas el próximo 31 de Diciembre. Los pacientes ya han sido derivados. El resto de centros estamos a la espera de que nos lo comuniquen ya que todo lo que sabemos es que el BOCAM ha publicado un cambio en nuestra actividad por la Ley de Duplicidades.
El empeño y profesionalidad de los equipos ha permitido, además de tratar el Trastorno por Uso de Sustancias, controlar la expansión de enfermedades infecto-contagiosas: SIDA, VIH+,hepatitis, y otras enfermedades de transmisión sexual así como minimizar el impacto de alteración de orden público (robo, delincuencia, tráfico de droga...). Todo esto queda constatado recordando cómo en la década de los ’80 el problema de la drogodependencia ocupó el primer puesto del ranking de preocupaciones de los ciudadanos; hoy en día, no consta en ese listado.
Por eso, el cierre de estos CADs, recortando la modalidad de tratamiento y los profesionales, supone UN PROBLEMA SOCIAL y de SALUD PUBLICA que nos afecta a todos ya que sus consecuencias acabarán influyendo en toda la población: profesionales que pierden su trabajo, usuarios que pierden su derecho de acceso un tratamiento público y de calidad y ciudadanos que sufrirán los efectos de riesgos en la salud pública y pérdida de estabilidad social.
Convocamos a profesionales, pacientes y ciudadanía a sumarse a esta lucha el próximo día 28 de Noviembre a las 17.00 horas. Saldremos desde la Consejería de Sanidad (Calle Aduana, 29. Metro Sevilla) hasta el Área de Gobierno de Hacienda del Ayuntamiento de Madrid (Calle Alcalá, 45)
LA SANIDAD NO SE VENDE, SE DEFIENDE
El empeño y profesionalidad de los equipos ha permitido, además de tratar el Trastorno por Uso de Sustancias, controlar la expansión de enfermedades infecto-contagiosas: SIDA, VIH+,hepatitis, y otras enfermedades de transmisión sexual así como minimizar el impacto de alteración de orden público (robo, delincuencia, tráfico de droga...). Todo esto queda constatado recordando cómo en la década de los ’80 el problema de la drogodependencia ocupó el primer puesto del ranking de preocupaciones de los ciudadanos; hoy en día, no consta en ese listado.
Por eso, el cierre de estos CADs, recortando la modalidad de tratamiento y los profesionales, supone UN PROBLEMA SOCIAL y de SALUD PUBLICA que nos afecta a todos ya que sus consecuencias acabarán influyendo en toda la población: profesionales que pierden su trabajo, usuarios que pierden su derecho de acceso un tratamiento público y de calidad y ciudadanos que sufrirán los efectos de riesgos en la salud pública y pérdida de estabilidad social.
Convocamos a profesionales, pacientes y ciudadanía a sumarse a esta lucha el próximo día 28 de Noviembre a las 17.00 horas. Saldremos desde la Consejería de Sanidad (Calle Aduana, 29. Metro Sevilla) hasta el Área de Gobierno de Hacienda del Ayuntamiento de Madrid (Calle Alcalá, 45)
LA SANIDAD NO SE VENDE, SE DEFIENDE
